El personaje de don Juan es un prototipo legendario español que inspiró numerosas obras literarias y artísticas en toda Europa y desde sus orígenes los distintos autores transformaron sus características.
El dramaturgo romántico español José Zorrilla escribió para el teatro ‘Don Juan Tenorio’, la versión más moderna y popular de la leyenda, en la que el protagonista consigue el perdón divino gracias al amor, mientras que en las anteriores historias no lograba salvarse del infierno.
Además de ser una obra muy representada todos los años, especialmente durante la noche del 1 de noviembre, parte de sus versos se utilizan en expresiones del lenguaje cotidiano.
EL DRAMA ROMÁNTICO
La obra versiona el personaje de Don Juan dentro de una concepción romántica que se refleja en los rasgos del personaje, los elementos de ultratumba y el amor que trasciende los límites de la muerte. El texto refleja la posibilidad que ofrece la doctrina católica del arrepentimiento y la salvación.
LA TRAMA
La obra narra las peripecias de Don Juan Tenorio, un caballero dedicado a los amoríos, los duelos y las apuestas (con una de ellas se inicia la trama: se reta con otro joven para ver quién ha seducido a un mayor número de mujeres).
LOS PERSONAJES
Don Luis Mejía: adversario de Don Juan. Don Gonzalo de Ulloa: padre de Doña Inés.
Don Diego Tenorio: padre de Don Juan.
Doña Inés de Ulloa: joven novicia que va a ser casada con Don Juan.
Doña Ana de Pantoja: prometida de Don Luis.
EL DON JUAN
La obra se desarrolla en Sevilla, la ciudad donde se localiza la leyenda de Don Juan, un personaje de origen español surgido durante la Edad Media, que reúne un doble tema: el del joven que bromea sin respeto con los muertos y el hombre de quien las mujeres se enamoran y a las que engaña y olvida. Tirso de Molina trató el tema en ‘El burlador de Sevilla y convidado de piedra’ (1627).
LAS VERSIONES
Resumen esquemático del argumento.
Primera parte:
Don Juan le dice a Don Luis que le quitará a su prometida, Doña Ana de Pantoja, a la que seduce, y además conquistará a una novicia. Al oír el desafío, el Comendador Don Gonzalo de Ulloa, padre de Doña Inés, quien debía casarse con Don Juan, niega su consentimiento y deshace el matrimonio convenido. Más tarde, el protagonista rapta a la joven del convento y ambos se enamoran locamente. Don Luis y Don Gonzalo se enfrentan a él en un duelo y mueren, por lo que Tenorio huye a Italia.
Segunda parte:
Cinco años más tarde, Don Juan vuelve a Sevilla y visita el cementerio donde está enterrada Doña Inés, quien murió de amor. Doña Inés también ha hecho una apuesta, pero con Dios, antes de la muerte de Tenorio: si ella logra el arrepentimiento del joven, los dos se salvarán, pero si no lo consigue se condenarán eternamente. Justo cuando el espíritu del Comendador está a punto de conducir a Don Juan al infierno, Doña Inés interviene y le ruega que se arrepienta. La novicia gana la apuesta y los dos suben al cielo rodeados de ángeles, cantos e imágenes celestiales.
Algunos de los adjetivos con que siempre veréis definidos los donjuanes de las diferentes versiones, palabras como:
- Ruin
- Fanfarrón
- Pendenciero
- Crápula
- Matón
- Juerguista
- Libertino
- Arrogante
- Jugador
- Mujeriego
- Seductor
- Conquistador
También hay algunas frases hechas en torno a Don Juan, frases hechas para significar que alguien es un conquistador, un seductor impenitente. Por eso se dice a veces:
- Que alguien es un donjuán
- Que alguien tiene fama de don juan
- Que alguien es un tenorio
- Que alguien es un calavera (el calavera por excelencia es don juan)
Y recordad que normalmente se escribe todo junto y con minúsculas, un “donjuán” que se convierte en una palabra aguda acentuada en la última sílaba, aunque está admitido escribir “ser un don juan”, con minúsculas, dos palabra y lógicamente sin acento: don juan.
SI LO QUIERES LEER PINCHA AQUÍ